*
Roberto`s Blog
La Star
Quando debarcamos en noviembre de 1949 en el puerto de Buenos Aires nos encontramos en una especie de hangar, que era la aduana, era grande y vacío, las paredes estában hechas de planchs de madera donde es veiían unos enormes afiches, todos iguales, representando a una rubia teñida de platinado con una sonrisa enigmática










Esto me ha sorprendido mucho, pensé que esta mujer debería ser una actriz popular en este país, pero su cara no me era conocida, pero en realidad la edad de diez años yo no tenia mucho conocimiento en materia de actrices célebres. De hecho, fue mi primer encuentro con   Evita!

Tendré en el futuro muchas más oportunidades de ser confrontado con la imagen omnipresente de la esposa de Juan Perón, el Presidente (dictador) de la Argentina en ese momento.
Rápidamente me di cuenta de que su nombre estaba en todas partes, en los anuncios de proyectos públicos aparecia su imagen y nombre, sobre enormes carteles llevando el lema invariable "Perón cumple, Evita dignifica". Sí, Evita, estaba absolutamente por todas partes, en las calles, en las estaciones de tren, autobuses y taxis junto a la imagen de la Virgen María, por encima del mostrador de las tiendas del barrio, en los bares y en al lado de la cruz en las paredes de las aulas escolares.
En la escuela donde fuí un aprendiz unos años más tarde, tuvimos dos días si clase, los obreros fábrica que albergaba mi escuela estuvieron en huelga porque la administración se había atrevido a cambiar de lugar la imagen de la rubia Nacional, porque la puerta sobre la qual el retrato estuvo colgado, debía ser reparada.

Después tuvimos muchos mas días de vacaciones imprevistas, fue el período en que un golpe militar derrotó al gobierno de Perón.

Evita murió algun tiempo antes del golpe, victima de un cáncer. Las ceremonias de duelo, en las cuales podia verse la muerta en un ataúd transparente desfilando por la ciudad, eran magníficas.

Luego su cadaver desapareció misteriosamente, con su ataúd de cristal ? Nadie sabía por qué ni cómo, y nunca más se encontró.